MENSAJE DEL ARZOBISPO
La Iglesia pide a las autoridades
aclarar el hecho
Exige a los
bolivianos un examen de conciencia
La Iglesia católica
demandó ayer el esclarecimiento de la tragedia de Palmasola y una reforma del
sistema penitenciario en el país, para evitar la repetición de los violentos
enfrentamientos en los que perdieron la vida 32 personas y al menos otras 60
quedaron heridas, por pugnas de poder entre reos.
En la homilía dominical,
monseñor Sergio Gualberti, arzobispo de Santa Cruz, señaló de máxima urgencia
“que las autoridades proporcionen cuanto antes a la opinión pública la verdad
de lo sucedido, así como los nombres de los fallecidos, para no dejar en una
incertidumbre exasperante a los familiares”.
El religioso señaló que el hecho volvió a
desvelar la gravedad del problema de las cárceles y que este problema demanda
respuestas de las autoridades de todos los niveles correspondientes.
Todos son responsables
"Ante esta tragedia,
todos tenemos que hacer un examen de conciencia, porque todos tenemos
responsabilidades, cada cual de acuerdo a su oficio: las autoridades por sus
omisiones y negligencias, y nosotros por nuestra indiferencia o poco interés
ante la situación inhumana de hacinamiento en que viven los privados de
libertad", manifestó el prelado.
Monseñor Gualberti
concluyó indicando que “no es posible” que la sociedad tolere la presencia de
niños en los centros de reclusión y que tampoco se deben cerrar los ojos “ante
la imagen de un niño inocente muerto, carbonizado en los brazos de su papá, ni
olvidar las repetidas violaciones de menores que hace pocas semanas han sido
denunciadas"
Condoloncia
Solidaridad cristiana
“Nuestra oración va por
los familiares de los fallecidos, a los que les manifestamos nuestra cercanía y
nuestros sinceros sentimientos de fraternidad y solidaridad cristiana en estos
momentos particularmente difíciles”, manifestó en la homilía monseñor
Gualberti, desde la catedral metropolitana de la capital cruceña.
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